¿Has notado que tu perro últimamente se muestra torpe y se da golpes con los muebles o paredes?. Otro síntoma que te puede alertar es que el cristalino aparezca blanquecino y opaco. Si además, sufre un lagrimeo excesivo es el momento de acudir a un centro especializado en oftalmología veterinaria en Valencia. Lo más probable es que tu perro sufra cataratas.

El cristalino es la lente natural del ojo que se encuentra detrás de la pupila: A través de esta lente nos llegan los rayos de luz y se forman las imágenes. Cuando el cristalino pierde su transparencia aparecen las cataratas con los que sufrimos una pérdida de visión. Con los años el cristalino se vuelve más opaco y aunque el envejecimiento es una de las principales causas de la formación de las cataratas también se puede deber a otras enfermedades; el consumo de determinados fármacos o causas externas como traumatismos. Las cataratas suelen ser hereditarias. Algunas razas son más propensas a padecerlas como los caniches o el cocker spaniel.

En nuestra clínica de oftalmología veterinaria en Valencia, un equipo de profesionales, tras una revisión oftalmológica determinará el tratamiento adecuado para tu perro. En la mayoría de los casos la mejor solución es la cirugía, pues las terapias con medicamentos no suelen resultar efectivas.

Para realizar la operación haremos previamente unas pruebas especiales. Posteriormente se procederá a anestesiar al animal. La intervención consiste en hacer una pequeña incisión en la córnea e introducir una lente intraocular artificial. El 95% de estas operaciones se realizan con éxito. 

En el Centro Veterinario Juan XXIII nos preocupamos por la salud de tu mascota y te ofrecemos una solución personalizada en su tratamiento.